lunes, 1 de abril de 2013

Hola, holita.

Si algo he aprendido últimamente es que eso que nos cuentan de sonreír a los problemas es la tontería más grande que nos han dicho nunca y que lo de "quien espera, desespera" es muy cierto.
No siempre vamos a tener lo que queremos, pero debemos querer lo que tenemos. Y es aquí a donde quiero llegar... ¿Por qué a veces nos cansamos de lo que tenemos? Y, sobretodo... ¿por qué luego nos arrepentimos?
En muchos casos, las confusiones nos llevan a perder lo que realmente queremos, nos hacen sentir cansados de lo que tenemos y nos quitan las ganas de seguir manteniéndolo.
Y luego, claro, llega el momento del arrepentimiento, pero quizá sea demasiado tarde. ¿Y qué hacemos? Llorar. ¿Y después? Llorar más. ¿Y luego? Pues luego hay dos opciones: tirar la toalla o conseguir recuperarlo.
Si sale bien: estupendo. Lo hemos conseguido.
Si sale mal: (ayudadme a terminar esto).


No hay comentarios:

Publicar un comentario