martes, 30 de abril de 2013

Adjetivos.

¿Por qué nos es más fácil poner nombres a los sentimientos malos que a los buenos?
Yo he dicho muchas veces eso de 'no tengo palabras' cuando estaba muy feliz.
Sin embargo, cuando se trata de estar mal, tenemos mil adjetivos.
Cansados, de dar todo por nada.
Rayados, por tener que escuchar mil mentiras.
Destronados, de ese reino que llamamos corazón.
Apartados, por alguien o por nosotros mismos.
Asustados, por las cosas que vemos a nuestro alrededor.
Perdidos, por no saber hacia dónde guiar nuestros pasos.
Infectados, de sentimientos que hacen daño.
Aplazados, por no llevar a cabo nuestros sueños.
Castigados, hasta por tener ideas propias.
Rechazados, por sentir más de la cuenta.
¡Cambiemos esto!
Sintámonos vivos, alegres, felices, reencontrados, sin miedo, sanos, libres.
Sonriamos por ser nosotros mismos.


lunes, 29 de abril de 2013

Olvidar no es una opción

Olvidar no es una opción, es una necesidad cuando se trata de estar bien física y mentalmente contigo mismo.
Olvidar no es tomar la vía fácil, al contrario. Es el camino más difícil que emprenderemos más de una vez en nuestras vidas.
Olvidar no es querer borrar ciertos recuerdos, si no querer apartarlos para crear otros nuevos.
Pero, ¿por qué nos cuesta tanto? Realmente creo que somos tan débiles que no queremos desprendernos de nuestro pasado. 
Nos obligamos a revivir ciertos momentos una y otra vez, hasta que los desgastamos. Y ahí, es cuando llegamos a olvidar.
Estúpidos recuerdos. Sólo están ahí molestando, ocupando sitio en nuestra memoria sin dejarnos llenarla de aromas nuevos, de caras nuevas, de otras caricias y otros besos en la espalda.
Pero cuando lo conseguimos, ¡ay!, qué felicidad.
Empecemos a volar más alto que nuestros sueños, porque siempre, siempre, habrá debajo un colchón de recuerdos que, aunque a veces sean tristes, estarán para amortiguar nuestra caída.

miércoles, 24 de abril de 2013

Hagamos música hasta volvernos locos

Dicen que cuando una puerta se cierra, se abre una ventana. Pero, a veces, esa ventana tarda mucho tiempo en abrirse. Y nos encontramos en ese momento de oscuridad, soledad, agobio y tristeza del que, en ocasiones, creemos no poder salir.
Débiles, frustrados y reclamando las fuerzas que nos pertenecen y nos han robado.
Engañados, tristes y llorando por quien nos ha dejado en la estacada.
Vivimos pendientes de un pasado lleno de recuerdos, mayormente dulces, que nos hace daño.
Vivimos atormentados por ese pasado en el que nos veíamos felices, que no nos deja avanzar.
Dejémonos llevar por lo bonito de lo incierto, por eso que llamamos presente y que debemos disfrutar.
Hagamos locuras, 
soñemos despiertos,
escapémonos de la realidad,
hagamos música hasta volvernos locos.


domingo, 21 de abril de 2013

Momentos.

Nuestras vidas están sujetas a base de lazos.
Hay lazos que nos unen tan fuerte que creemos que nunca se van a romper, pero nos terminan ahogando. 
Hay otros que, sin darnos cuenta, se van desgastando de tanto apretarlos para que no se suelten.
También hay lazos llenos de nudos que no podemos deshacer. Nudos que se van acumulando hasta hacer ese lazo muy corto, dejando marcas en la piel, para acabar rompiéndose.
Por el contrario, hay lazos que parecen tan endebles que sólo con mirarlos se romperían, pero no. Aguantan tanto que resulta completamente imposible de entender, pero ahí están, resistiendo los peores temporales.
¿Por qué no probamos a vivir sin ataduras?
¿Por qué no nos dejamos llevar?
Las personas estamos hechas a base de momentos pero, queridos amigos, esos momentos no podemos atarlos para siempre.

martes, 16 de abril de 2013

He perdido los papeles.

He perdido los papeles.
Los papeles con los que he limpiado tu opinión, que no me sirve de nada.
Los papeles con las lágrimas que se me escaparon alguna que otra noche.
Los papeles con las canciones que escribí por y para ti.
También he perdido las ganas.
Las ganas de que vuelvas.
Las ganas de abrazarte.
Las ganas de recuperar el tiempo perdido.
Pero he ganado.
He ganado amigos.
He ganado música.
He ganado tiempo.
He perdido todo lo que me recordaba que era tuya.
He ganado todo lo que me recuerda que soy mía.


domingo, 14 de abril de 2013

"Jodida pero contenta"

Estrenamos calorcito, camisetas cortas y alergias en abundancia. Estrenamos primavera y lo que ella conlleva, porque no creo que sea yo la única con la cabeza loca estos días...
Hoy, domingo por la tarde y con este solecito que me está dando por la espalda, puedo decir que estoy muy contenta. Si.
He pasado un fin de semana maravilloso rodeada de la gente que más quiero en el mundo.
Desde el concierto que dimos el viernes no he sido capaz de quitarme la sonrisa de la boca.
Y es que parece que, poco a poco, el tiempo va poniendo las cosas en su lugar, va uniendo lo que tiene que unir, y separando lo que no merece la pena que esté junto.
Por fin se ve todo un poco más claro y empiezo una nueva etapa, como dice una gran canción, "jodida pero contenta".

 

jueves, 11 de abril de 2013

A veces...

A veces tengo ganas de quemar todos los recuerdos y de ver arder cada año que ha pasado desde los quince.
A veces deseo secuestrar las ganas que aún me quedan de que vengas y me abraces y amordazarlas en algún sótano.
Hay noches que no quiero dormir para no soñar contigo, ni estar despierta para pensarte.
Pero a la vez sigo teniendo en mente cada una de las promesas que nunca hemos cumplido, quizá por remordimiento o, simplemente, por que me gusta creer que algún día las cumpliremos.
A veces sonrío si te pienso, las menos, porque ya no soy la niña que esperaba a que volvieras.
A veces lloro si te pienso, cada vez menos, porque aunque tarden, las heridas siempre cierran.
A veces, escribo sobre ti sin darme cuenta. 
A veces, no necesito más musa que yo.


sábado, 6 de abril de 2013

Gracias, Take Away.

Soñar es fácil, pero conseguir que esos sueños se hagan realidad no lo es tanto.
Un día, encontré a una persona que se convirtió en mis manos y, muchas veces, en mis ojos.
Se llama Antonio, es mi guitarrista, y me atrevo a decir que se convirtió en el hombre de mi vida. Es la persona con la que más tiempo he pasado en los últimos meses y con la que más momentos he compartido. Hacemos música, sí, pero también nos hemos convertido en tan buenos amigos que compartimos prácticamente todo.
Después, apareció Patry. Es una persona para la que tengo pocos adjetivos, simplemente porque es impresionante. Aparte de una gran tía, es una maravillosa percusionista.
Los tres somos <<Take Away>> y ahora estamos grabando una maqueta.
Sólo me queda darles las gracias por compartir conmigo los mejores y los peores momentos, por querernos tanto y tan bien y, simplemente, por ser música.


miércoles, 3 de abril de 2013

Estoy enfadada con el amor.

Si, estoy enfadada. Enfadadísima. 
Conmigo y con muchos otros cantautores, compositores, poetas, directores de cine, artistas en general, cuyas obras, canciones, películas, poemas, sólo hablan de amor. 
¿POR QUÉ?
Joder, ¿qué hago yo mal para que mi historia de amor no sea como la de aquella película en la que después de enfadarse ocho millones de veces se reconcilian y son felices para siempre?
¿Por qué escucho música y todas las canciones me cuentan lo triste o lo feliz que está quien la compuso por haberse enamorado?
¿Por qué leo poemas y la mayoría son sobre la belleza de esa dama inalcanzable por la que alguien daría su vida?
Sobrevaloramos el amor. Si. Lo tengo claro. Y yo creo en el amor, que conste. Pero estoy aburrida.
Te quiero, te odio, me enfado, nos dan los puñeteros celos, nos reconciliamos, nos queremos, nos mandamos a la mierda. Y, ¿de qué sirve? De naaaaada.
Reivindico el derecho a huelga de sentimientos.
Creo que lo tengo claro: estoy enfadada con el amor.


lunes, 1 de abril de 2013

Hola, holita.

Si algo he aprendido últimamente es que eso que nos cuentan de sonreír a los problemas es la tontería más grande que nos han dicho nunca y que lo de "quien espera, desespera" es muy cierto.
No siempre vamos a tener lo que queremos, pero debemos querer lo que tenemos. Y es aquí a donde quiero llegar... ¿Por qué a veces nos cansamos de lo que tenemos? Y, sobretodo... ¿por qué luego nos arrepentimos?
En muchos casos, las confusiones nos llevan a perder lo que realmente queremos, nos hacen sentir cansados de lo que tenemos y nos quitan las ganas de seguir manteniéndolo.
Y luego, claro, llega el momento del arrepentimiento, pero quizá sea demasiado tarde. ¿Y qué hacemos? Llorar. ¿Y después? Llorar más. ¿Y luego? Pues luego hay dos opciones: tirar la toalla o conseguir recuperarlo.
Si sale bien: estupendo. Lo hemos conseguido.
Si sale mal: (ayudadme a terminar esto).